domingo, 13 de abril de 2014

Macrobiótica y Algas

ALGAS:

¿Por qué incluir las algas en tu dieta diaria?

-Por su bajo contenido en calorías y grasas.

-Por su alta concentración de minerales, vitaminas, proteínas (aminoácidos esenciales) y carbohidratos indigeribles.

-Por su destacado nivel de fibra dietética.

-Por su elevado contenido en nutrientes.

-Porque las algas son una óptima fuente mundial de alimento.

Deliciosas y nutritivas

Las algas son un alimento muy nutritivo y con un alto contenido de minerales y vitaminas. Figuran entre los productos de la naturaleza más ricos en calcio, fósforo y hierro. El yodo estimula la tiroides y ayuda a adelgazar. También son importantes las cantidades que presentan de enzimas, magnesio, azufre, cloro, manganeso y silicio, así como de oligoelementos (hierro, cobre, zinc, níquel, molibdeno, plata, cromo, etc.)

Por otra parte, las algas (especialmente Wakame y Kombu) tienen un elevado porcentaje de vitamina B, con efectos positivos en el sistema nervioso y en las dietas predominantemente vegetarianas.

En las algas se encuentran presentes varios oligoelementos. Destacando el zinc, necesario para la correcta secreción y asimilación de la insulina; el hierro y el cobalto, encargados de evitar la anemia, o el silicio y el calcio, que contribuyen a hacer más fuertes los huesos, las uñas, la piel y el cabello.

Complemento de una dieta saludable

Asimismo, las algas son un complemento perfecto para las dietas de adelgazamiento. Al aumentar de tamaño cuando entran en contacto con el agua, producen un efecto saciante que ayuda a calmar el apetito. Además, su gran riqueza en yodo ayuda a regular el funcionamiento de la glándula tiroides, responsable de que se quemen los hidratos de carbono. Por último, también influye el hecho de que las algas aporten mucílago, un tipo de fibra que estimula el buen funcionamiento del intestino grueso, permitiendo una buena eliminación diaria de los residuos

LA DIETA MACROBIÓTICA:

¿En qué consiste la dieta macrobiótica?

La dieta macrobiótica divide los alimentos en:

Alimentos Yang: cereales, legumbres, pescado, carne, sal, verduras de raíz... Su energía es caliente tonificante y contractiva.
Alimentos Yin: azúcar, miel, lácteos, frutas (sobre todo las tropicales), verduras, berenjena, tomate y remolacha, el alcohol. La energía de estos es fría, dispersante y debilitante.
Ventajas de la dieta macrobiótica:

Se eliminan todos los productos refinados como el azúcar blanco, el pan blanco, los embutidos, la carne, los dulces industriales, las bebidas alcohólicas y los refrescos industriales.
Introduce las Algas Marinas en la dieta, como parte del menú diario.
La dieta macrobiótica recupera los cereales como parte de la dieta y sobre todo introduce el concepto de que deben ser integrales y cultivados sin pesticidas.
Adecua la dieta a cada persona según su constitución física, el país donde vive y la estación del año.
Se emplean remedios naturales y terapias como el Shiatsu, con lo cual empiezas por la dieta pero te acabas metiendo de lleno en el mundo de la Medicina Natural.
La dieta macrobiótica busca el equilibrio emocional y espiritual. Podría decirse que la dieta es en realidad la excusa para hacerte consciente de que necesitamos equilibrarnos a todos los niveles para vivir felices.
La macrobiótica tiene muchas ventajas pero también debemos tener cuidado. Es de las dietas donde es más importante asesorarnos al máximo por alguien de la más absoluta confianza. Y sobre todo hacerse de vez en cuando alguna analítica para ver los niveles de Hierro y B12.

Por Salud y Vida Natural

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