viernes, 30 de enero de 2015

Ejercicio, ¿por la mañana o por la tarde?

¿Es más beneficioso en un momento o en otro? ¿de qué depende nuestra elección?
Hay quienes se levantan con una gran vitalidad, a quienes les cuesta despegarse de las sábanas, otros a los que se les cierran los ojos cuando la tarde empieza a decaer y quienes trasnochan cotidianamente sin problemas. Los momentos de más energía son los más aconsejables para realizar ejercicio físico, pero también los objetivos de la persona en cuestión.

"Hay personas que de forma natural se levantan muy bien por la mañana, están muy activos y que se va a dormir muy pronto. Hay otras personas que les cuesta activarse y que por las noches no encuentra el camino de irse a dormir", explicó a BBC Mundo el doctor Luis Franco Banfonte, secretario general de la Federación Española de Medicina Deportiva.

Por la mañana


"Desde el punto de vista metabólico y fisiológico, como para tener un control del peso, es recomendable hacer ejercicio físico alejado de las horas de la comidas. El mejor momento en ese sentido es a primera hora de la mañana", defendió Banfonte.

Otras razones a favor es la constancia, ya que, si a primera hora de la mañana uno cumple con su rutina de ejercicios, que surjan imprevistos a lo largo del día no les afectaría. Además, "si uno hace ejercicios que requieren movilidad, como correr o montar bicicleta, se incrementan algunas hormonas o algunos neurotransmisores como las endorfinas que hacen que uno se sienta mejor, que esté con más vitalidad y más animado", añadió Banfonte.

Por la tarde

Sin embargo, hay que tener en cuenta aspectos como la temperatura corporal o los niveles de hormonas, ambos están muy bajos por la mañana, no así por la tarde, que ya alcanzaron un nivel mayor, por lo que, según un estudio del Centro de Investigación Clínica de la Universidad de Chicago citado por la BBC, hace que el cuerpo esté en mejores condiciones para ejercitarse y reduce el riesgo de lesiones.

Liberar la tensión acumulada a lo largo de la jornada de trabajo es otro punto a favor de las tardes

Con todo, "a última hora de la noche, a partir de las nueve o diez, tampoco sería muy recomendable hacer ejercicio, sobretodo de alta intensidad, porque puede afectar al ritmo del sueño y retrasar la necesidad de dormir. Esto haría que al otro día se esté más cansado y fatigado", aclaró Banfonte.

No hay comentarios:

Publicar un comentario